A la vanguardia de la buena mesa
Las listas de reserva son espectaculares y las llamadas desde todos los puntos del mundo abundantes, pero los responsables de El Bulli no se echan atrás en sus firmes planteamientos: si la cocina es una representación artística, tiene que ser tratada con mimo y reflexión, no ser convertida en un producto de consumo más.
Las listas de reserva son espectaculares y las llamadas desde todos los puntos del mundo abundantes, pero los responsables de El Bulli no se echan atrás en sus firmes planteamientos: si la cocina es una representación artística, tiene que ser tratada con mimo y reflexión, no ser convertida en un producto de consumo más.
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